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- Autor, Redacción
- Título del autor, BBC News Mundo
La Corte Suprema de Reino Unido dictaminó en abril que la definición de mujer debe basarse en el sexo biológico asignado en el nacimiento, es decir, que las mujeres transgénero no entran dentro de la definición legal de mujer.
Eso, aunque cuenten con un certificado de reconocimiento de género (CRG).
“El concepto de sexo es binario, una persona es mujer o es hombre”, sentenció el tribunal.
Los jueces británicos dictaminaron que los términos “mujer” y “sexo” en la Ley de Igualdad se refieren a una mujer biológica y al sexo biológico.
Asimismo, deja en claro que si un espacio o servicio está designado como exclusivo para mujeres, una persona que nació hombre pero que se identifica como mujer no tiene derecho a utilizarlo.
La Corte Suprema argumentó que ésta era la única interpretación consistente y coherente.
Y este histórico fallo ya está teniendo consecuencias concretas en Reino Unido.
Veto en el fútbol en Inglaterra
La Asociación de Fútbol (FA en sus siglas en inglés) anunció este jueves 1 de mayo que las mujeres transgénero ya no podrán jugar en el fútbol femenino en Inglaterra a partir del 1 de junio.
Ya la FA había modificado su reglamento el 11 de abril y aplicaba criterios de elegibilidad más estrictos —como demostrar unos niveles de testosterona determinados en los últimos 12 meses o proporcionar un historial de terapia hormonal—, para que las mujeres transgénero pudieran seguir jugando en el fútbol femenino en todos los niveles.
Pero tras la sentencia del Tribunal Supremo el 15 de abril, derogó su política y ahora solo se permitirá jugar a las mujeres biológicamente nacidas.
“Este es un tema complejo, y nuestra postura siempre ha sido que si hubiera un cambio sustancial en la legislación, la ciencia o el funcionamiento de la política en el fútbol base, lo revisaríamos y modificaríamos si fuera necesario”, declaró la FA.
“Entendemos que esto será difícil para quienes simplemente desean practicar el deporte que les apasiona con el género con el que se identifican, y nos estamos poniendo en contacto con las mujeres transgénero registradas que actualmente juegan para explicarles los cambios y ver cómo pueden seguir participando en el deporte”.
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El mes pasado, la FA informó que había 20 mujeres transgénero registradas entre los millones de jugadores aficionados. No hay ninguna mujer transgénero registrada en el fútbol profesional en los países de origen.
La semana pasada, el grupo antidiscriminación Kick it Out afirmó que el fallo del Tribunal Supremo tendría “consecuencias de gran alcance” e instó a que “todos en la comunidad futbolística se traten con respeto y compasión”.
Fiona McAnena, directora de campañas de la organización benéfica de derechos humanos Sex Matters, afirmó que la decisión era “tardía” y que la política anterior era “absurda”.
Tras el fallo del Tribunal Supremo, Natalie Washington, líder de la campaña Fútbol vs. Transfobia, declaró a BBC Sport que se produciría un aumento de los abusos contra las personas transgénero.
“Estoy segura de que veremos una mayor reticencia por parte de las personas transgénero a participar en el deporte y la actividad física”, declaró.
“Siempre que hay una resolución legal o gubernamental al respecto, o una organización se posiciona, se produce un repunte de los abusos”.
La FA es el primer organismo deportivo importante que modifica sus criterios de elegibilidad para personas transgénero tras la sentencia del Tribunal Supremo.
Uso de los baños
Una de las medidas que en seguida se dedujo del fallo fue el uso del baño.
La ministra de Igualdad, Bridget Phillipson dijo en declaraciones a la BBC que las mujeres trans deberían utilizar los baños según su sexo biológico.
Phillipson no llegó a decir explícitamente que las mujeres trans deberían usar los baños masculinos. Sin embargo, declaró en el programa Today de BBC Radio 4: “El fallo fue claro al afirmar que el acceso a las prestaciones y servicios debe basarse en el sexo biológico”.
Al ser presionada para que se aclarara si una mujer trans debería usar los baños masculinos o femeninos, reiteró: “El fallo es claro”.
Anteriormente, Phillipson afirmó que la ley sobre el acceso de las mujeres trans a espacios separados por sexo en función del sexo biológico “se aplicaría de forma generalizada”.
Sin embargo, enfatizó que la Comisión para la Igualdad y los Derechos Humanos (CEDH) “establecerá directrices adicionales y un código de prácticas estatutario, porque necesitamos asegurarnos de que todas las personas tengan la posibilidad de acceder a servicios seguros y apropiados, que respeten su privacidad y dignidad”.
En particular, era necesario que hubiera “servicios apropiados y disponibles para todas las personas, incluidas las personas trans”, en lo que respecta a entornos como hospitales y vestuarios.
Al ser presionada sobre las implicaciones del fallo para las mujeres trans que buscan usar un baño hoy, respondió: “El fallo fue claro en que el acceso a las provisiones y servicios debe basarse en el sexo biológico. Pero sé que muchas empresas, grandes y pequeñas, se asegurarán de contar con los servicios adecuados; por ejemplo, muchas han optado por servicios unisex o cubículos separados que cualquier persona puede usar”.
Por su parte, la Comisión de Igualdad y Derechos Humanos (EHRC) publicó una guía provisional sobre cómo las organizaciones deben interpretar la decisión del Tribunal Supremo del Reino Unido que establece que la mujer se define por su sexo biológico en la ley.
La nueva guía dice que, en lugares como hospitales, tiendas y restaurantes, “no se debe permitir que las mujeres trans (hombres biológicos) utilicen las instalaciones para mujeres”. También afirma que las personas trans no deben quedarse sin instalaciones disponibles.
La guía también establece que “en algunas circunstancias la ley también permite que a las mujeres trans (hombres biológicos) no se les permita utilizar las instalaciones para hombres, y a los hombres trans (mujeres biológicas) no se les permita utilizar las instalaciones para mujeres”.
La guía de la EHRC añade: “Sin embargo, cuando existen instalaciones disponibles tanto para hombres como para mujeres, las personas trans no deberían verse en una situación en la que no existan instalaciones que puedan utilizar”.
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